Son las horas,
que pasan seguidas
largas esperas,
cortos gozos.
Y llego el “sabio” mortal
haciendo de Dios
y nos trastoca
el ritmo de la vida
cambiando la medida,
del tiempo,
que nos lleva
dulce o amargo,
nos deja en la penuria
el sideral
orientando extraviados
los rumbos de camino.
27/03/2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario